Buenos días con todos, en primer lugar quisiera agradecer a David por crear este blog, que para mí ha resultado ser una comunidad.
Mi historia está caracterizada por algunos detalles, como la de cada uno los que compartimos esta experiencia tan significativa de nuestras vidas, sin embargo se parece mucho a las de las demás personas. Tuve una relación de pareja con una mujer TLP, que la voy a describir cronológicamente a continuación:
NOS CONOCEMOS
Es curioso el nivel de atractivo que tiene una persona TLP, no solo en su físico sino en su aparente forma de dar amor, cuando la conoci, me cautivó instantaneamente, una mujer preciosa, ojos claros, piel delicada como la seda, silueta perfecta, en fin el sueño de todo hombre (a nivel físico).
La conocí en una fiesta, empezamos a bailar y todo iba color de rosa, lamentablemente durante esa noche bebimos, y pude ver las primeras banderas rojas, como irse al baño y luego verle bailando con alguien mas, en fin ¿quien era yo para juzgarla?, una mujer soltera (sospechosamente), que a parte había tomado, y no me debía ningún tipo de compromiso puesto que la conocí esa noche.
Toda esa noche la resumí con «estaba tomada» ¿quién actúa en sus cabales cuando bebe alcohol?. En fin.
La fiesta continuó en una casa y cuando «recobró» la conciencia me veia con ojos de amor, quería estar todo el tiempo conmigo, y me transmitía mucha sed de mi, como si yo era el hombre que toda su vida había esperado.
Recuerdo haber salido a una tienda y ella ya me tomaba de la mano, me contaba cosas familiares en donde dicho sea de paso, tenía una vida «dura» de la cual era la víctima, ese día ya hubo besos apasionados que no los podía poner solo en el plano físico, se sentía algo mas, una especie de conexión emocional, de la cual posteriormente me volvería adicto.
Para ese punto siento que ya inició la disonancia cognitiva, mi mente me decía, el diá de ayer tenía actitudes extrañas, pero ahora que está en sus «cabales» te muestra quien en realidad es, cómo puedes juzgarle?.
Nos despedimos no luego de una sesión de besos apasionados, y como vivíamos en ciudades distintas me pidió que la visitara, a lo que gustosó accedí.
Me sentía muy feliz, más allá del desenlace que eso pudiera llegar a tener, tenía a una chica hermosa y dulce correspondiendome, que más podía pedir.
VOY A VISITARLA
Antes de visitarla iniciamos el contacto por mensajes, noté algo extraño, veía mi mensaje pero intencionalmente demoraba en responder, tal vez lo hacía premeditadamente para hacerse desear, al inicio no le di mucha importancia y solo pensaba, «debe estar acostumbrada a tener muchos hombres detrás de ella, y no debe esperar que cree que es u a mujer fácil» (irónico para lo que había pasado hasta ese momento).
En fin, llegó el dia de visitarla, fui muy feliz, era un viaje de 2 horas y me sentía muy emocionado de poder verle a la «princesa» que conocí hace unos días.
Salimos a cenar y la pasamos muy bien, aunque notaba que quería estar muy cerca mio, que esperaba mayores muestras de afecto, que esperaba mas de lo que yo consideraba «normal» darle hasta ese momento.
Mi idea era dejarla en su departamento y regresar a mi casa, cuando me dice «no quiero que se acabe la noche» yo invito un vino.
Pusimos una playlist en mi coche y empezamos a beber, volvieron los besos apasionados y ella me pedía implicitamente sexo, con sus muestras de deseo, una parte de mi no quería consumar el acto porque eso iría en contra de la imagen de «princesa» que había forjado en mi mente asi que le dije que la próxima consumaríamos el acto.
A pesar de todo habíamos pasado hermoso esa noche y regresé a mi casa mucho mas ilusionado que antes y con deseo intenso de volver a verla.
Para nuestro contacto por mensajes empezó otra vez la intermitencia, períodos largos de tiempo en que no me respondía, y esperaba a que sea yo el que de la iniciativa para otra vez volver a la euforia que solía mostrarle.
SIGUIENTE CITA CON ELLA
Llega la segunda vez que la visito, y se repitió lo mismo, cena hermosa, ella con mucha necesidad de afecto de mi parte y trato de pareja de mi parte, a lo que cada vez me iba sintiendo mas comodo, y posteriormente el vino respectivo, en ese momento de besos aṕasionados, otra vez vino la necesidad sexual y me dijo cuando vamos a tener intimidad? a lo que respondí la proxima vez que venga por ti a lo que mostró una especie de berrinche en el que textualmente me dijo «ya voy una vez escuchando eso».
Por lo que accedo y vamos a un hotel muy costoso dicho sea de paso, una parte mía estaba muy feliz, mi parte instintiva, mi ego, y otra parte se sentía defraudada, no es la mujer que tenía en mi mente, en fin tuvimos una noche de sexo apasionado, pero el ritmo de ella era diferente al mío, como si estuviera acostumbrada a tener relaciones sexuales que no rebasan los 10 minutos, mi ritmo era distinto por lo que no pude terminar aquella noche, y ela mostró rabia ante eso.
Luego conversamos y tenía un especial interés por mi pasado, siempre me pregutaba por mis ex pareja, y por lo que yo sentía por ellas, parecía obsesionada con ese tema, yo jamás le hable de nadie y obvimente tampoco le pregunté por su pasado.
DESPUÉS DE LA SEGUNDA CITA
Luego del encuentro sexual, no se contactó conmigo para nada, desapareció, a lo que yo asumí era porque yo no «terminé» esa noche, y ya empecé a volverme loco con el tema, sin embargo decidí no buscarle y alejarme, tuve una cita con mi psicólogo, y me dijo que como tiendo a ser «neurótico» estoy sobre analizando la situación y preocupandome innecesariamente, que estoy siendio machista, que tal vez ella solo se sintió utilizada, y que la busque, (pésimo consejo).
Le di la razón y la busqúe, reaccioné a una historia que subió a su instagram en donde estaba extremadamente guapa(su mejor arma), y me volvió a hablar con la euforia de siempre, esta vez invitandome ese fin de semana a su casa a pasar la noche juntos y a un evento cultural, que curiosamente tenía que ver con sexo.
TERCERA CITA Y EMPEZAMOS LA RELACIÓN
Ese día fue el fín de mis defensas ante ella, y el inicio de la relación, que puedo describir como lo mas tóxico que he tenido que pasar en mi vida, pasamos hermoso en el evento, ya no habían barreras emocionales, todo era dar rienda suelta a lo que sentimos, ella parecía conocerme de toda la vida, y nos fundimos en una explosión emocional indescriptible, sin embargo desde mi punto racional «no era normal que en 4 salidas estemos asi de compenetrados» por lo que pedirle que sea mi novia sería un error.
Sin embargo, luego del evento decidimos ir de fiesta, bailamos, nos compenetramos mas, y me preguntó que esperas de mi?, que quieres de mi? que sea tu novia o que?, porque yo no soy de cosas informales, me sentí acorralado pero nada incómodo, esa parte instintiva y emocional quería asi que le propuse y ese dia oficialmente fuimos novios, hubiera sido la noche perfecta pero una pregunta que hizo me sacó de casillas, me dijo: «¿que harías si me quedo embarazada»?, una pregunta rara para el primer dia de noviazgo a lo que interpreté que en el pasado debió haber tenido una experiencia negativa en ese aspecto, volviendo a mis burdas justificaciones, a lo que respondí que me quedaría con ella y obviamente se puso feliz.
El inicio de la relación fue muy sexual, ella quería tener sexo muy regulamente, cosa que evidentemente no me disgustaba, sin embargo la mente me traía pensamientos de que no debe ser así solo conmigo. En fin, inicia nuestra relación de novios.
Los 3 primeros meses debe haber reprimido tanto su impulsividad que no la hacía tan evidente, sin embargo tenía cambios abruptos de su estado de ánimo, estaba super bien y luego entraba en mutismo, no decía nada, y pasaba a parecer apática, y luego otra vez la explosión emocional, para ese momento el lado «postivo» era un 70%, asi que valia la pena.
PRIMER ARRANQUE DESPROPORCIONADO
Cada vez me iba sintiendo mas cercano a ella, y desarrollando mas mi lado protector, del que ella sutilmente se iba aprovechando, hasta que llega el primer arranque desproporcionado:
Ibamos a salir de fiesta una noche, a celebrar nuestro amor, nos estaba yendo de maravilla, se puso guapísima y fuimos al mejor club de la ciudad juntos, obviamente yo pagaba todo, estabamos perfectos, pasando una noche increíble, hasta que uno de los guardias se acerca a mí y me comenta que ella está abandonando el lugar y no pueden dejarle salir sin que pague la cuenta.
Me acerqué y estaba enfurecida, su mirada denotaba odio, rencor, venganza, me decía que me largue, que no me acerque, no sabía como reaccionar, no podía dejarla salir en ese estado a la madrugada en una ciudad grande.
Traté de contenerla y empezó a agredirme, la gente del lugar pensaba que yo le hacía algo, querían golpearme, pero por sobre todo eso yo solo quería protegerla, salio corriendo a la madrugada por las calles como una loca y yo detrás de ella convenciéndola que me deje llevarla a su casa.
Luego de una hora la convencí pero eso si me dijo que le largue de su casa, y que nunca volvería a poner un pie ahí, que me detesta porque no puedo olvidar mi pasado, cosa que era absurda, jamás hice algo como para que haya interpretado eso, para ese momento dejé de justificar y dije NO, mi novia tiene TLP, no es una cuestión de alcohol, ni de celos, ni de engaños del pasado, es un TLP.
Al otro día le envié una foto de mi pecho lastimado y sangrando de lo que me hizo y sin el mínimo remordimiento me dijo, ah yo también tengo moretones que te haces victima, cosa que para variar era mentira. Fui a ver mis cosas en su casa, me dijo que no es mi empleada para bajarlas y que suba yo mismo, ya arriba solo mojó sus ojos, me pidió perdón y me pidió que no la deje.
En ese punto la disonancia era terrible, ¿como puede tratarme asi alguien que dice que me ama?, al final me quedé y recuerdo esa noche haber estado durmiendo juntos mientas lloraba y decía, «no merezco algo asi».
DECIDO ESTAR CON ELLA PESE AL TLP
Posteriormente a eso, ya no había justificación para ella ni para mi, decidí estar con una mujer TLP, en mi parte consciente sabía lo que implicaba, pero para ese punto era adicto a sus explosiones emocionales. En fin, gracias a mi personalidad no fui sumiso a sus conductas, logré establecerle límites, a los que se adhería intermitentemente, no terminaría nunca esta historia asi que voy a resumir los peores momentos:
– Me terminó por lo menos 10 veces en los dos años, una de las peores, por no contestarle una llamada, cuando estaba con mi madre porque mi tío había fallecido, o no llevarle a comer cuando mis padres necesitaban que les ayudara en la mudanza a su nueva casa. Solo piensan en sus necesidades, parece que el resto del mundo no les importara, luego de terminarme, me bloqueaba de todo, hacia ghosting, y luego vuelven de una forma ridicula, no disculpándose no asumiendo su error, sino victimizándose y haciéndote sentir lo peor.
– Como no suelen tener metas claras, desde su pensamiento infantil el mundo es una fantasía de cuento de hadas, no buscaba trabajo, y tuve que ayudarle a conseguirlo, solo Dios sabe cuánto me esforcé porque logre conseguir un trabajo, y cada vez que no lo conseguía me insultaba y recriminaba, como si el beneficio fuera para mi. Al final está trabajando hoy, en una empresa muy grande, gracias a mí, y no me arrepiento porque hice lo que sentía, pero me duele mucho haber sido víctima de tanta humillación por ayudarle.
– Me triangulaba y me hacía sentir que hay personas mas valiosas que yo, atacaba mi autoestima, no respetaba mis emociones, me sacaba de su casa sin importarle nada de lo que me pueda pasar, en esos momentos muestran rasgos psicopáticos.
– Me dijo que le ayude con la terapia, dije que claro que puedo pagar la mitad de sus sesiones, a lo que reaccionó agresivamente, lanzándome el dinero, e insultándome, nunca fui de los sumisos que simplemente accedía a las demandas que planteaba
– Utilizaba las redes para «castigarme»,. a cada pelea borraba todas las fotos conmigo, y subía estados convenientemente en ropa interior y diciendo que merece lo mejor.
– Me alejó de todo mi medio, para ella salir con amigas era normal, pero el hecho de que yo salga estaba totalmente mal, iba a engañarle, siempre me acusó de serle infiel, curiosamente nunca l fui, y ahora que estoy sin ella, en un baño de conciencia, se que debe haber sido ella la que iba acostarse con alguien cada vez que me terminaba.
– En las «peleas» en lugares públicos se iba, salia del lugar sin importarle nada, y yo debía salir corriendo tras ella, o con el carro en movimiento ella lo apagaba en media calle y salia corriendo, luego dejé de seguirla y le dije que se haga cargo de sus inmadureces
– Mis niveles de estrés se dispararon, dejé de hacer ejercicio, no podía dormir las noches, me alejé de personas que quiero, y empecé a tener un desgaste en todo sentido, me daba miedo contestar sus llamadas, me daba miedo contestarlas, todo era reclamo, condena, cuestionamiento, pero obviamente «equilibrado» por su explosión emocional.
– Me recalcaba que quiere casarse, que tengamos hijos y que formemos una familia, siempre mi parte consciente me dijo que no podía hacer eso con ella, y gracias a eso nunca caí en esos juegos y gracias Dios nunca se embarazó, mi lado emocional me hacía sentir «honrado», y hasta la fecha me cuesta entender todo desde el plano racional.
TERMINAMOS LA RELACIÓN
Era como leer un libro de un solo capítulo que se repetía constantemente, hasta que un día me faltó al respeto como de costumbre, le dije cosas de las que no me siento orgulloso, como que es una persona «desequilibrada» que busque ayuda, que me cansé de estar con ella, y terminamos, no sin antes decir que me cogió la abstinencia a las 3 semanas y la volví a buscar, obviamente «arrepentido» y ella en plano de victima.
Volvimos y luego a la semana me dijo que se acostumbró a estar sin mi, asi sin mas ni mas, con tipicas mentiras de que ojala nos «volvamos a encontrar y ahora si sea para siempre», pensó que yo iba a estar ahí como siempre, pero me armé de valor y la bloqué de todo, y decidí sanarme.
45 días de contacto cero, revisé su instagram y está más feliz que nunca, sobre todo con el trabajo que yo le conseguí que según ella es por su esfuerzo, decidi felicitarle por su graduación a lo que me agradeció y posteriormente subió una historia que se iba de fiesta, para darme el mensaje de que es mas feliz sin mi.
55 días luego de eso, y 4 meses luego de haber terminado esa relación autodestructiva y digo auto porque somos nosotros quienes nos permitimos estar ahí, puedo decir que estoy sanando.
Ya no caigo en la disonancia, y aunque intentó aplicarme hoovering hace un mes no caí.
MIS CONCLUSIONES DESPUÉS DE LA RELACIÓN
Solo puedo decirles, son personas dañadas en su interior y es responsabilidad de ellas sanar, no podemos hacer nada por ellas, no somos salvadores, pero por nosotros si podemos hacer mucho.
Salgan de esas relaciones, eso no es amor, somos personajes en su cuento de hadas, que solo pueden reemplazar, no ejercen conexion real, no somos mas que un recurso.
No le guardo rencor, de hecho pido Dios por ella, que la bendiga y que le vaya bien, pero más le pido por mi, merezco mas, hay muchas personas sanas allá afuera, no merecemos tal tortura.
El duelo ha sido demasiado dificil para mi, he experimentado ataques de pánico por la abstinencia, son cono una droga, aún así no pienso cortar el contacto 0, no podemos ser amigos de esas personas.
Agradezco a esta comunidad que no se ha dedicado a justificar las conductas del TLP, como lo hacen muchos, no tenemos porque ser sus depositarios de desecho emocional, que se hagan responsables y busquen ayuda, y no dañen al resto, este ha sido mi último desahogo, y hoy mas fuerte que nunca digo que jamás volveré a ese lugar donde tanto daño me hicieron
Fuerza a todos.