Hola a todos. Me llamo Daniel y esta es la experiencia de mi relación con una mujer Trastorno Límite de la Personalidad durante dos años.

 

COMIENZO DE LA RELACIÓN

La conocí en una junta en 2019 con ex compañeros de escuela. Yo no había sido su compañero y la verdad que en esa primera instancia no hablamos nada. Posterior a eso, había un grupo de WhatsApp en donde ella solía decirme cosas, pero yo no la tomaba en cuenta, en ese tiempo yo estaba en una relación que finalmente terminó.

Fue a fines de ese año que ella me dijo ya de manera directa que yo le interesaba y yo le dije que OK. Salimos, lo pasamos muy bien. El tema es que a los días se puso extraña, se alejó sola y yo la verdad no le di relevancia, no la tomé en cuenta.

Con las semanas, ya en 2020, ella dijo que sabía que se había puesto extraña, que la disculpara, pero yo no la tomé en cuenta. Pasaron varios meses hasta que llegó mi cumpleaños más o menos, allí ella se me declaró y yo le dije que me debía demostrar que era real lo que decía que sentía.

Pasó el tiempo y la verdad que allí sí se mostró interesada, me venía a buscar a la casa y empezamos a acercarnos más, hasta que comenzamos una relación por fines de octubre.

Todo iba bien, ella tiene un hijo y la verdad que si bien había situaciones medias raras que no me gustaban (como que un tipo le ayudaba a pagar un diplomado, un curso), yo las toleraba.

 

PRIMERA PELEA

El tema es que vino el primer quiebre en diciembre de ese 2020 y fue una pelea muy desproporcionada. Fuimos a la playa con su hijo, lo estábamos pasando muy bien. En un comienzo la relación con el niño fue compleja porque el era celoso, pero en esa ocasión allí estuvo bien el tema.

El asunto es que ella en un momento me pide el teléfono para poder sacar unas fotos que nos habíamos tomado en la playa y yo la verdad, confiado, se lo pasé.

 

El tema es que de repente veo que ella está revisando mis conversaciones de WhatsApp, yo no le tomé importancia y el tema es que me se volvió muy violenta.

Ella vio una conversación con una persona de antes de que tuviéramos nosotros una relación y en el que de verdad no se hablaba de nada raro. Explotó mal, delante de su hijo, habíamos ido a mi casa en la playa y ella era la que estaba conduciendo. Al final me dejó tirado allí en la playa. Al rato volvió para hacerme unas preguntas absurdas sobre mi ex pareja (?) y luego nuevamente se fue. Tuve que tomar un bus de vuelta solo. Al rato, ella me llama diciéndome que nos devolviéramos juntos. Yo no la tomé en cuenta.

Pasaron los días y ella me pidió de juntarnos de nuevo, porque me amaba y qué se yo y yo medio entre dudas, como que le acepté, aunque ella me siguió tirando la culpa de que yo no le había sido honesto con esa historia (que era parte del pasado). La cosa es que decidí volver y las cosas anduvieron bien su tiempo.

 

EMPEZAMOS A VIVIR JUNTOS

Llegó 2021 y la verdad la relación pasaba por peleas, pero era más tontas las verdad que temas serios. Principalmente por celos enfermizos de su parte y que no tenían sentido, pero la cosa andaba bien.

Fue a mediados de junio que ella tuvo problemas en su casa y su madre la echó (según su relato que a estas alturas no sé si creerle), así que le dije que mejor nos fuéramos a vivir juntos.

Yo soy profesional, fotógrafo y ella administrativa. El tema es que cuando estábamos viendo ese tema, ella decide renunciar a su trabajo y eso generó que costara encontrar un departamento. Sin embargo, logramos hacerlo.

 

LA CONVIVENCIA

Vivir con ella al principio fue todo bien, algunos problemas, pero menores, aunque con situaciones que no me gustaban, como cosas de comportamiento, que la familia llegara sin avisar y sin decirme nada y yo si bien le decía que me molestaba eso, ella no lo tomaba en cuenta.

Fue más o menos cuando ella encontró trabajo que la cosa se puso mal y la relación no volvió a lo mismo. Empezó a salir a beber con sus compañeros nuevos, salía con su jefe y empezó a tener un problema peculiar: a que se le olvidaran las cosas.

Yo la verdad nunca lo comprendí bien. Todo esto desencadenó peleas y agresiones fuertes de su parte, a tal punto de que una vez amenazó con que no iba a llegar a la casa y no la esperara. Al rato, ella me escribió y dijo que iba a llegar antes de que cierta hora. Finalmente llegó a las 4 AM borracha y yo le dije que hasta aquí se llegaba.

Me rogó que por favor no, que era un error, blabla, el tema es que le dije que era un ultimátum porque ya me tenía cansado sus malos tratos (yo al otro día entraba a trabajar a las 7 AM), sus faltas de respeto, y que debía ir a terapia psicológica y psiquiátrica.

 

EL QUIEBRE

Las cosas anduvieron relativamente normal hasta que nuevamente me sacó mi teléfono, para ver que yo tenía unas fotos guardadas de años de mi ex, pero que quedan en la nube, no por algo en especial.

Yo la verdad me cansé y le discutí que ella tenía exactamente lo mismo en su celular. Se hizo la loca, y cómo será que ese día íbamos a ir por primera vez al estadio con su hijo (un dia muy importante para su hijo).

Como que a ella le daba lo mismo, hasta un punto en que dijo que no iba a ir a acompañarnos y yo le dije que no podía hacer eso y no acompañar a su hijo en un dia tan señalado para el. Al final sí fue.

Pasaron los días y ella empezó a estar muy distante, poniendo de excusa el tema de que su hijo quería dormir con ella (su hijo tiene 11 años), estábamos teniendo poca intimidad y de la noche a la mañana comenzaba a cambiarme los planes que teníamos pensado.

Al final, un día le dije que qué era lo que nos estaba pasando y ella, muy resoluta, dijo que en realidad yo era un tipo tremendamente egoísta.

Al otro día, hubo una pelea monumental, en donde ella me empezó a pagar todo el dinero que yo alguna vez le había pasado, sin explicación.

En un punto, ella me dice que me debo preparar comida yo solo porque ella lo haría solo para ella y su hijo.

 

Yo le pregunté qué diablos le pasaba y se transformó. Que no me iba a aguantar más, me dijo las peores cosas que alguien me haya dicho y le dije que se fuera del departamento. No me hizo caso, me empujó en la cocina y en un momento me dejó encerrado dentro. Yo estaba trabajando.

La situación escaló a tal que el niño vio todo y yo le dije que estaba él, lo fui a consolar a la pieza que teníamos, la cosa es que le dije que qué íbamos a hacer y ella seguía en estado de furia.

Me empujó, me arañó el rostro y los brazos y finalmente decidí llamar a su familia para que la calmara. Incluso, su hijo me comenzó a golpear, pensando que yo estaba golpeándola a ella, siendo que jamás la golpié.

Su familia llegó, en ese rato ella me tiró mi celular al suelo. Después fue extraño, porque se encerró en la pieza con su hijo a ver una película. Yo hablé con una de sus hermanas y ella me dijo que esto era habitual en ella. La cosa es que me fui yo del departamento y terminamos.

Al principio fue muy agresiva con lo del término y hasta grababa las conversaciones o quería conversar donde hubiese cámaras y yo no comprendía, siendo que no la toque ni nada.

Después vino su cambio, que por favor lo pensara, que por favor no lo dejáramos así, pero yo no quería más violencia en mi vida.

 

EL REGRESO

Ya en 2022, y con veces que de repente ella me escribía para tonteras yo sin tomarla en cuenta, un día la vi en Tinder, estando en enero, y allí ella me confesó que estaba con un tipo, yo le dije que le había durado poco el duelo, pero bueno, y después finalmente que en realidad era mentira.

Entre medio, en sus actos, ella usó mis tarjetas de crédito y yo le pedí que por favor no hiciera eso.

Pasaron las semanas y nos juntamos un día (tontamente de mi parte) y ella me reclamaba que todo lo que había pasado era mi culpa.

Entre medio yo me enteré que con suerte fue un par de veces a psicoterapia y que al psiquiatra (porque era el mismo que yo tenía) solo había ido una vez y en rigor fue para pedirle pastillas para dormir.

Llegó un fin de semana y me escribió para decirme que me amaba y blabla, yo le creí, me dijo que juntarnos como el 25 de enero más o menos. Yo accedí. Cuando llegó el día, la noté extraña y me decía que ella había sido una muy mala mujer y que me había hecho sufrir junto a su hijo. Yo noté algo extraño.

La cosa es que fuimos a un local y ella me confesó que había estado con un tipo. Yo me lo tomé muy mal, le dije que no podíamos volver.

La cosa es que al rato me escribió para decirme que en realidad estuvo todo ese mes que estuvimos separados con este tipo, onda pasaron 5 días desde la última vez que me vio y que la última vez que se habían acostado fue el fin de semana que me habló para verme.

Yo me lo tomé mal. Luego me dijo que no, que era mentira.

 

NUEVA RECONCILIACIÓN

Llegó febrero y ella me siguió buscando. Yo no la tomaba en cuenta, que se había equivocado. Yo más que nada me dolía que me hubiese mentido tanto. La cosa es que un día tontamente fui a su departamento y pasó lo que imaginas. Ahí volvimos y ella me ofreció que podíamos hacer terapia de pareja. Yo le dije que OK.

La verdad es que el tratamiento de esta terapia no sirvió de absolutamente nada. De hecho, en la semana de la primera sesión ella habló con un tipo para ponerse de acuerdo y juntarse con él para salir y yo no le hallé sentido alguno. De hecho hasta la terapeuta le dijo que para qué hacía eso. No tuvo respuesta.

Pasaron los meses y la verdad es que la cosa duró bien solo hasta abril del 2022. Allí, en semana santa, le escribió el tipo con el que había estado mientras estuvimos separados y se puso muy complicada.

Yo le pregunté si finalmente había sido una vez o varias veces las que estuvieron y ella me juró por su hijo que solo una vez y que nunca había ido a su casa.

Jamás le creí, a tal punto que una vez, porque estaba con mucha desconfianza (y de la que no me siento orgulloso) le vi su celular y le hablaba a una amiga de que había estado todo un mes con el tipo y en la misma cama donde nosotros dormíamos y que yo estaba enfermo de la cabeza.

Peleamos mal, tratamos de arreglar, pero nunca fue lo mismo desde allí. En junio ella vino a mi casa de nuevo (no había venido en todo ese tiempo por las cosas que había hecho) y se comportó muy extraño.

Hubo comportamientos extraños de su parte, sobre todo de su celopatía, como por ejemplo tomarme el celular después de que hacíamos el amor, porque a ella le daba con que yo había tenido sexo con una tipa mientras estuvimos separados, cosa que jamás ocurrió.

 

MI CUMPLEAÑOS

Llegó mi cumpleaños en julio y tuvo un comportamiento que fue ya el comienzo del fin para mí. Yo le pedí que llegara un poco temprano para que me ayudara con las cosas de la casa y finalmente llegó de las últimas.

Según ella se quedó dormida. La cosa es que estaba muy enojada porque decía que yo no la tomaba en cuenta, pero yo estaba viendo a todos los invitados. De repente, sin avisar, llegó y se fue y todos quedamos sin explicación.

Yo me enfadé, peleamos por WhatsApp pero no le importó.

Al otro día, ella me dijo que me iba a preparar algo en su casa y yo dije que OK, que iría en la tarde.

Fui y cuando llegué, no estaba. Me molestó mucho, porque habíamos quedado en algo, al final me «hizo» algo a las 20:00 PM con el niño llorando porque yo estaba molesto y en donde en la casa no había nada arreglado.

Hablamos luego y le dije que por qué no tenía conmigo ciertos mínimos de respeto, de buen trato, que no le costaba nada avisarme. No me respondió nunca bien.

El asunto es que yo la noté rara y en la semana vi que ella le puso clave a su celular, siendo que nosotros teníamos nuestros equipos sin nada por una cosa de transparencia. Me llamó la atención, la cosa es que me doy cuenta de que tenía guardada fotos del tipo con el que había estado a principios de año.

Peleamos, nos alejamos unas semanas y ya empezamos a tratarnos mal. Entre eso, falleció una mascota muy querida para mí y fue como si no le hubiese importado.

De hecho, cuando pasó, en el día que yo estaba remal porque tenía que estar en el veterinario y la iba a dormir, ella estaba publicando cosas sobre la mujer soltera y esas cosas.

Me escribió al otro día. Le dije que no quería verla, pero finalmente se apareció y con el hijo. En esa ocasión, ella me dijo que quizás lo mejor era terminar y yo le dije que sí, que tenía razón porque veía que la relación no tenía sentido. Ella lloró y dijo que en realidad no quería dejarme. Yo la verdad entré en un periodo muy confuso.

Pasaron los días y armó una pelea con unos ex amigos porque según ella le dio otra vez con que yo me quería acostar con otra tipa, cosa que no era cierta.

Me trató horrible, que yo le daba asco, que ya por eso no quería acostarse conmigo (cosa que nunca noté la verdad porque había sexo siempre) y que era un miserable y varias cosas más.

Me terminó, y a los pocos días veo que agrega a este tipo con el que había salido a comienzo de años. Siempre hacía el mismo patrón: se enojaba y lo añadía. A mí me parecía extraño y eso que siempre le dije «mira, si quieres quédate con él y yo no te molesto más».

El tema es que pasaron los días y volvió a buscarme, ahora con el pretexto de que su mamá tenía cáncer. Yo le dije que lo lamentaba, pero que no podía ayudarla si me había tratado pésimo la última vez que hablamos.

Me dijo que bueno, que la perdonara y yo le dije que le pidiera consuelo a los tipos que agregaba posteriormente.

Finalmente, me rogó para que no la dejara sola con los días y yo le dije que OK la acompañaba porque su mamá me había tratado bien siempre, pero que en los días siguientes debíamos conversar.

En ese periodo, yo le pregunté qué había hecho un fin de semana que no estuvimos juntos y me dijo que hizo trekking con una amiga. Yo quedé muy dudoso.

La cosa es que conversamos el tema y yo le decía que no comprendía el porqué vez que me peleaba partía a buscar a este tipo, ella se defendió y no supo explicar bien, hasta que finalmente se enojó tanto y me pidió mi teléfono.

Yo se lo pasé y le pedí el suyo. Sorpresa mía fue ver que ella, mientras estábamos pareja, había estado saliendo a hacer trekking con el tipo con el que estuvo a comienzos de año.

 

EL FIN DE LA RELACIÓN

Obviamente, peleamos y no volvimos nunca formalmente, porque según ella solo salieron, lo que no tenía ningún sentido para mí.

A las semanas, yo la invité a mi casa a una celebración y no apareció y finalmente, hace un par de semanas atrás, vi que armó un grupo de amigas en donde confesaba que su amante la había desechado y que yo era un hombre maravilloso pero que necesitaba la «adrenalina de la infidelidad».

Yo estaba muy mal y cometí un error, que fue el fin de semana pasado ir a su casa, como para buscar una explicación, pero ella no quiso ni siquiera abrirme la puerta y me amenazó con ponerme una orden de alejamiento.

 

Falsamente, decía que yo la estaba hostigando a ella y a su hijo, cosa que jamás hice.

Esa es mi historia. Sé que he cometido muchos errores, me desconozco totalmente, me siento pésimo por las miles de tonteras que he hecho, pero a veces me dejé llevar por la rabia y porque siento que aguanté demasiado. Ahora empecé un tratamiento psicológico y voy a retomar con psiquiatra, quien me dijo en su momento que ella era alguien con TLP.

 

 

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